La mitad de los españoles de 60 a 69 años mantiene a los hijos
Luis Izquierdo 12/01/2008
Están pensando en jubilarse o ya lo han hecho, pero son el principal apoyo de la actual sociedad española, pues están en el corazón de las redes sociales y familiares.
La descripción es del catedrático de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, Víctor Pérez-Díaz, y forma parte de las conclusiones del estudio "La generación de la transición: entre el trabajo y la jubilación", hecho para el servicio de estudios de La Caixa.
Los españoles entre los 50 y los 70 años son la generación que ha protagonizado la transformación de la sociedad en los últimos 30 años. Pero también son ahora los hijos que se ocupan de sus padres (uno de cada cuatro tiene a los suyos viviendo consigo); los padres que se ocupan de los hijos (el 57% de los progenitores todavía tienen alguno en casa), y los abuelos que atienden a los nietos (casi un tercio participa del cuidado diario de los pequeños). "Podemos decir que la sociedad funciona gracias a familias extensas", indicó Pérez-Díaz, antes de señalar que a pesar de la inminencia o la llegada de la jubilación "se quedan en escena de una manera muy importante".
Los españoles entre los 50 y los 70 años son la generación que ha protagonizado la transformación de la sociedad en los últimos 30 años. Pero también son ahora los hijos que se ocupan de sus padres (uno de cada cuatro tiene a los suyos viviendo consigo); los padres que se ocupan de los hijos (el 57% de los progenitores todavía tienen alguno en casa), y los abuelos que atienden a los nietos (casi un tercio participa del cuidado diario de los pequeños). "Podemos decir que la sociedad funciona gracias a familias extensas", indicó Pérez-Díaz, antes de señalar que a pesar de la inminencia o la llegada de la jubilación "se quedan en escena de una manera muy importante".
Tanto, que el sociólogo los considera como "un factor que contribuye culturalmente a la construcción de caracteres no patológicos" en una sociedad en la que ni educadores, ni medios de comunicación ni padres agobiados por sus extensos horarios laborables se ocupan de socializarlos. Pérez-Díaz incidió en la importancia de que los abuelos vivan cerca del domicilio de sus nietos para afianzar esas pautas tradicionales que forman el carácter moral de la gente.
Por lo que se refiere al cuidado de los ancianos, el estudio revela que hasta un 72% de los miembros de esta generación de transición que no comparten domicilio con sus padres acuden a diario o varias veces cada semana a visitarlos y prestarles alguna clase de ayuda.
Con respecto a la atención a los hijos, un 48% de los padres entre 60 y 69 años tiene todavía alguno en casa, lo que supone el registro más alto de Europa. En la clasificación les siguen los italianos, con un 40%.
Si el recuento se hace entre los padres españoles de entre 50 y 59 años, el porcentaje asciende al 77%. Al margen de que sus hijos estén o no emancipados y los padres jubilados o en activo, el estudio ha contrastado que es mucho más habitual que los padres presten ayuda económica a sus vástagos (el 52% lo había hecho en el último año) que al contrario (16%).
Por lo que se refiere a los nietos, la mitad de los entrevistados los tiene y, de ellos, alrededor del 50% se ocupa de diferentes tipos de cuidados como tenerlos en su propia casa o ir a buscarlos al colegio con frecuencia. Tienen más tiempo y, además, la mayoría goza de unas razonables circunstancias económicas. Por ejemplo, el 91% cuenta con una vivienda en propiedad - el porcentaje más alto de toda Europa aunque dos de cada diez todavía estén pagando la hipoteca- y el 27% incluso posee una segunda residencia. Además, uno de cada tres tiene un plan personal de pensiones privado.
Conociendo esos datos no es extraño que sólo el 8% gaste más de lo que ingresa; el 47% emplea lo mismo que recibe y el 45% incluso ahorra. Peor están las cosas en el terreno de la salud. Algunos indicadores muestran que los españoles están entre quienes padecen un mayor número de dolencias en el Viejo Continente. Así, el 40% de los entrevistados dijo haber acudido en siete o más ocasiones al médico en los 12 meses anteriores a la realización de la encuesta. No es extraño por ello que más de la mitad admita no hacer deporte casi nunca y que el porcentaje en el caso de los jubilados ascienda al 63%.
En el lado positivo, el consumo de tabaco desciende de forma drástica cumplidos los 55 años. Mientras en la franja de edad entre los 45 y 54 fuma uno de cada tres españoles, en la inmediatamente superior sólo lo hace el 16%. Que desciende por debajo del 10% cuando se cumplen los 65.
La media de fumadores entre los varones mayores de 50 años se sitúa en el 28%, lo que coloca a España entre los países con mayor consumo masculino de tabaco de Europa, sólo superado por Grecia y Dinamarca.
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